Pilota Valenciana

¿A qué se refiere? La Pilota Valenciana es es un deporte tradicional, variante del juego de pelota, que puede practicarse en varias modalidades, en el que dos o más contrincantes forman dos equipos que compiten lanzando una pelota, golpeándola con la mano desnuda o con ligeras protecciones.

La tradición y el deporte son dos conceptos que, en muchas ocasiones, van íntimamente ligados, pero la pilota valenciana es un caso especialmente llamativo, sobre todo por el hecho de que una zona dé nombre a una actividad deportiva. 

La pilota valenciana es un deporte heredado del Imperio Romano y la Antigua Grecia, por lo que en Francia, Bélgica, Holanda e Italia también tienen sus propias versiones. Aquí en nuestro país la más parecida es la pelota vasca, que se diferencia básicamente porque se juega la pelota contra un frontón. Pero, en cambio, en Valencia, se juega con 2 equipos formados por uno o más integrantes compiten golpeando la pelota con sus manos, que son protegidas con un vendaje especial. Existen diferentes modalidades: 

• Estilo directo: Juego Internacional, ‘galotxetes’, la modalidad de ‘llargues’, la ‘galotxa’, el Raspall y la llamada de ‘escala i corda’. Esta última es la más popular de todas. La puntuación es de 15, 30, ‘val’ y ‘joc’, contándose los juegos de 5 en 5 hasta llegar a la cifra que los jugadores pactan. Es costumbre que los espectadores, situados a un lado del recinto, haga sus apuestas.
• Estilo indirecto: Los equipos se enfrentan lanzando la pelota contra un muro llamado frontón; en las modalidades de frontón y frontón con frares.

En la provincia ha existido desde siempre la tradición de jugar en los denominados ‘trinquets’, que son los recintos en los que tiene lugar la partida bajo la mirada de un público, de hecho, en el siglo XVI existían 13 trinquetes sólo en la capital. Pues bien, esta costumbre salvó a la ‘pilota valenciana’ de la prohibición de jugar en la calle en tiempos de la Corona de Aragón, consiguiendo así que este deporte perdurase a lo largo del tiempo e incluso llegara a conocer su propia edad de oro entre mediados del siglo XIX y mediados del XX.

Después de este auge le siguió una década de crisis que a su vez fue seguida por un renacer. Esta nueva etapa dorada vino de la mano con un gran jugador que se convirtió en leyenda, Francisco Cabanes, conocido más como el Genovés, quien logró atraer la atención de miles de aficionados con su espectacular juego, siendo como un fenómeno de masas. 

La pilota valenciana, además de deporte, también es cultura, estando ligada a la historia de la Comunidad Valenciana, arraigándose en la gente, pues tanto es así que incluso, en la época de Franco cuando las leyes no lo permitían, cada vez que se jugaba en los trinquetes se hablaba valenciano, siendo un refugio para todos aquellos que amaban su lengua materna. Todo esto muestra la importancia tradicional que este deporte ha sido en la vida de mucha gente y en la misma Comunidad Valenciana.